El pasado 9 de enero, nos dimos cita, en Guaro, pueblo de la Axarquía malagueña para, desde allí, realizar el ascenso a La Torca, que con sus 1.500 m es la cumbre mas alta de este tramo del Arco Calizo de la Dorsal Bética.
Aunque el día está totalmente despejado, la temperatura en nuestro punto de partida, 358 msnm, denotan que en La Torca y tras la inmensa noche de nevada tendremos unas vistas espectaculares.
La Torca, se encuentra en la prolongación del Arco Calizo de las Sierras de Almijara y Tejada, continuando hasta Antequera y la Serranía de Ronda. Esta Sierra actúa como límite natural entre la Axarquía y otras zonas de Málaga y Granada.
Desde la cumbre divisaremos el boquete de Zafarraya, que es el paso de montaña que marca la transición entre la Axarquía malagueña y la tierra de Alhama. Tras el boquete, aparecen los Llanos de Zafarraya, que constituyen una fértil y bella planicie.
La ruta comienza junto al cauce del río Guaro, que ya nos sorprende por su abundante caudal. Comenzamos la subida, acortando por los campos de olivos y junto al cauce de un arroyo, hasta llegar a lo que es un carril, unos doscientos metros por ese carril y otra vez nos saldremos a la derecha, para continuar por entre piedras y vaguadas de duro canchal, que como dice nuestro guía, Manolo, “tienes la impresión de ser el primero que pasa por allí”.
Pepe Koete,el eterno caminante de Santiago, la "menda", y juanlukita
Vistas que nos sorprenden, ya que es increíble, disfrutar de nieve y ver el mar un poco mas allá del embalse de la viñuela.
Mientras subimos, las plantas nos permiten no poner límites a nuestra imaginación, y así mis ojos decidieron ver aquí un puerco espín.
La cantidad de nieve caída, marcará nuestras huellas, que sin presionar, dejan este precioso dibujo.
El cielo de un azul intenso contrasta con el blanco de la fría nieve, y nos permite realizar y tomar fotos que además de divertidas, serán bonitos recuerdos, por los que ni siquiera hay que pagar.
Cada metro en nuestro ascenso nos va descubriendo un entorno totalmente nevado, dejando que nos recreemos no solo con la visión cercana de La Maroma nevada, sino de toda la sierra de la dorsal bética con sus cimas blanquecinas, como la que vemos, El Camarolo.
La última parte de la subida, se hace mas dura, debido a la cantidad de piedras y nieve ya en la zona, incluso de hielo en las espacios mas en la sombra, que hicieron que algún que otro compañero, pusiera su culo a la altura del suelo.
Ya en la cima, 1.500 msnm, totalmente nevada, hasta el propio vértice geodésico, disfrutamos mirando la belleza de La Maroma, muy cerquita, y no tan lejos, Sierra Nevada.
Una estupenda descripción de la ruta y una preciosas fotos. Como todo lo que escribes, realmente bonito.
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